Berlina relanzan su segundo LP «Regresiones» acercando al público dos «nuevos» formatos físicos por un lado en vinilo de 12″ y por otro lado el sacrosanto cassette que está devolviendo a la vida el sello discográfico CIUDAD OASIS
BERLINA nace como evolución natural de tres integrantes de Million Ways con la incorporación del baterista Toni Valverde. Sus primeras demos, en las que se hace patente la infuencia del brit pop de comienzos del milenio, les introducen de inmediato en el circuito de salas de Madrid, hasta que en 2009 graban su primer material en Estudios Reno, el mismo que les acercó a los textos en castellano y que trazó los visos de lo que es la banda hoy día.
En 2012 editan “Parcialmente Despejado“ bajo la producción de Manuel Cabezalí. En enero de 2013 vuelven al estudio Lado Izquierdo, con Dany Richter a los mandos y, de nuevo, Manuel Cabezalí en la producción. En 2016 publican su LP de debut, “Desértico” (Grabaciones a Montones / The Burros Discos), donde repiten el tándem Richter-Cabezalí. En sus últimos trabajos la banda cuenta, además, con Carlos Hernández Nombela, quien ha trabajado con bandas como Triángulo de Amor Bizarro o Viva Suecia, como productor.
BERLINA parece haber alcanzado, su plena madurez, con un sonido muy bien defnido, ritmos despeñados y distorsiones que han transformado su proverbial shoegaze en una bofetada de noise con claras reminiscencias de My Bloody Valentine o Ride en su faceta más instrumental, pero siempre manteniendo la personalísima factura que les sitúa en un lugar único entre el dream pop y el post-rock.
Regresiones es el segundo largo de BERLINA, grabado en Estudio Uno, mezclado y producido por Carlos Hernández Nombela (Triángulo de Amor Bizarro, Viva Suecia…) y la propia banda. Regresiones es un disco de miradas hacia el interior, de momentos de evasión y búsqueda idealizada de la realidad, que podemos encontrar en canciones como Planeta Animal, Nueva Dimensión, Viaje Iniciático o en Arte Encontrado, canción enigmática y una de las joyas ocultas del disco.
El estilo de BERLINA se mantiene, aunque con canciones más directas y de menor duración que a las que nos tienen acostumbrados. Densas capas de fuzz y sintetizadores en el single Lucen Sombras o en Presencias, contrastan con el sonido más ambiental, vaporoso y con toques electrónicos de temas como Cuerpos Extraños o LFO. Una fusión ideal de elementos procedentes del shoegaze y del dream-pop bajo la única etiqueta que les define: BERLINA.
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